Ago 18 2010

Vela ligera – Navegando en Raquero

Raquero, velero de vela ligera de escuela

Un Raquero, es una embarcación específicamente diseñada para el aprendizaje de la vela. Es un velero sencillo y de comportamiento noble que permite familiarizarse con los diferentes rumbos y configuraciones vélicas antes (o después, en mi caso) de pasar a barcos de crucero.

En la pasada travesía a Menorca, Andreu me hizo una demostración del manejo simultáneo de caña y escota de mayor, para controlar el exceso de potencia de la vela cuando bajábamos planeando las olas, y de ese modo evitar la orzada. Creo que unas cuantas clases de vela ligera que me den soltura me irán muy bien, así que ya voy apuntando en esa dirección.Un Raquero de vela ligera en la playa de cubellas

En la Base Náutica de Cubelles, Mario y Sara se sueltan con sus primeras clases a bordo de un Raquero de escuela. Ceñidas, empopadas, largos y viradas de boya durante tres horas, y al final un briefing para corregir errores y resolver dudas. Si aprenden rápido pasarán a manejar un Velic, embarcación algo más rápida y más inestable, que les exigirá más rapidez y concentración para gobernarla.

Velic de vela ligera

Ambas embarcaciones son un reflejo en miniatura de un barco de crucero. Foque, mayor, botavara, escota, contra… todo exactamente igual pero a una escala menor y manejable sin necesidad de winches. Y como al acabar, se suben a la playa y se desmontan, es el cacharro ideal para aprender.

Tú que opinas, ¿merece la pena hacer un curso de vela ligera? Si… No? Deja un comentario con tu opinión.

De momento, un poco de vídeo, rodado en la Base Náutica de Cubelles, mientras me voy buscando una escuela que me enseñe lo básico.



Ago 2 2010

Menorca a vela

Amanece y la superficie del mar comienza a rizarse cumpliendo con las previsiones y el plan de la travesía. Salimos ayer noche de Mataró sobre las 00:00, algunas horas más tarde de la idea inicial, tras estudiar bien la meteo y decidir que era mejor negociar el viento y las olas con luz de día puesto que el piloto automático no funciona ni al derecho ni al revés.Amanecer camino de Menorca

Al poco de salir el sol la brisa se hace más estable; desenrollamos el génova y apagamos el motor. Variamos un poco el rumbo, apuntando unos grados más al norte a fin de ganar algo de aparente y poder mantener unos 6 kts. Si la previsión se cumple, cuando alcancemos la franja de viento de NW, éste nos permitirá recuperar el rumbo necesario.

El día transcurre y aumenta el viento y el mar de fondo, siempre dentro de las previsiones. El aparente entra al través y las olas por la aleta de babor, lo que obliga a corregir y anticiparse cada vez que éstas intentan que no acertemos con la isla. A media tarde ya se divisa la costa a lo lejos. El viento aumenta hasta los veintipico nudos y las olas ya hacen de media metro y medio y algunas series alcanzan los dos. Como queda poco para alcanzar el cabo y ahí quedaremos protegidos, ya no rizamos, así que con alguna planeada superamos los 10 kts. En alguna se me va el barco de orzada y Andreu me enseña a llevar la caña y la escota de mayor a una, para poder desventar la vela cuando empiezas a perder el control. Interesante herencia de las técnicas de vela ligera que me da que pensar si no sería adecuado hacer un cursillo para coger un poco de feeling.

Pasado cabo Binicous, el mar se aplana bastante rápido aunque el viento sigue, ya que la isla de Menorca no es muy alta. En poco rato llegamos a la bocana del puerto de Ciutadella y llamamos por el canal 9 para pedir amarre. Sale una zodiac del puerto y nos indica que no hay sitio, pero que si esperamos a que salga el ferry podemos abarloarnos en el muelle comercial hasta las 9 de la mañana en que vuelve. Así lo hacemos y alucinamos con la carrera que se monta en cuanto sale. Dos catamaranes y dos barcos de charter más un par de franceses se lanzan gas a fondo para coger sitio los primeros… sin palabras. Al rato estamos amarrados y tras la ducha nos dirigimos al centro para cenar algo, ya con el estómago más asentado.Amarrados en Ciutadella

La mañana se presenta nublada y el parte méteo de NW, así que seguiremos la costa sur en busca de alguna cala para fondear. Cala Fustam y cala Escorxada tienen un acceso complicado por tierra, así que será más fácil encontrar sitio allí. El viento por la aleta y la mar plana nos hacen avanzar a toda velocidad. Tanta, que cuando un pez muerde el anzuelo en el curri que llevamos atado al balcón de popa, toca reducir un poco para poderlo cobrar. Es algo alargado tipo barracuda, o espetón, bastante bonito, y que en la cazuela se verá precioso. Tenemos alguna otra picada pero se escapa antes de recoger todo el sedal. La vida es así, unos ganan y otros pierden.

Cala Turqueta, Cala Macarella, Cala Galdana… van desfilando ante nuestros ojos. En todas multitud de mástiles. Cala Trebeluja no está tan llena, pero el acceso fácil a su playa hace que mucha gente tenga plantada la toalla. Llegamos a Cala Fustam, un barco ocupa el poco espacio de fondeo y necesitaríamos una segunda ancla para evitar el borneo, que no tenemos. Cala Escorxada es la elegida; hay sitio, el fondo es de arena, la playa solitaria… qué más se puede pedir (bueno, un molinete, pero eso es otra historia). Hierro al agua, tomamos un par de marcaciones… no garrea… escalera de baño y chapuzón!

El día pasa entre baños, excursiones con el dinghy a las calas cercanas, pesca, en ese estado de insolencia ensoñadora que parece que facilita el verano y el mediterráneo. Del año que viene no pasa. ¡Hemos de ir a Grecia!Goleta en el fondeo de Cala Escorxada

Después de comer levantamos el fondeo y vamos en busca de otra cala para dormir, algo más protegida. A ratos al largo y a ratos a orejas de burro, acabamos en Cala n’Porter, donde la propietaria de un Amel de 50 pies nos berrea de malas maneras que fondeemos más lejos de su barco.  La vida es así, unos hacen amigos, y otros no.

La noche transcurre con un poco de meneo y todos en algún momento nos levantamos a comprobar el fondeo, o asegurar algo que hace ruido. El chapuzón matutino recién levantado en un agua transparente… impagable. Ahora vamos rumbo a Maó; pasaremos por el freu de la Isla del Aire, que tiene 8 metros de sonda. Más que suficiente, pero aún así reducimos la marcha y vigilamos desde la proa. Al pasar el cabo, el mar y el viento de NW se hacen de nuevo patentes, la isla ya no protege tanto. Trazamos varios bordos en ceñida a rabiar que ya apetecía después de dos días navegando al largo y entramos por la bocana del enorme puerto natural, protegido por la fortaleza de la Mola Maó con la mayor izada. El recorrido hasta el interior es de más de media hora. Cuando estamos llegando nos sale a recibir Cristian, el marinero de S’Altra Banda, una marina minimalista que consiste en dos pantalanes flotantes en el centro de la bahía y que tiene su punto.S'Altra Banda, una isla dentro de la isla

Ya llegó la almiranta y el bebé de Andreu, mañana vienen otros amigos que colaborarán en montar la guardería a bordo. Es curioso lo bien que se adaptan los niños pequeños al mar. Hoy iremos a motor para evitar una escora peligrosa, y conoceremos la cala Binibeca, donde prepararemos una ensalada con queso fresco de Maó, comprada junto al mercat del Peix. Por la tarde, todo lo bueno se acaba, entramos de nuevo al puerto para desembarcar.  En la orilla derecha se ve fondeado al Aphrodite, un ketch oceánico diseñado por André Hoek y en la otra, el Tiketitoo de German Frers, dos veleros representantes de dos conceptos muy distintos de vivir la navegación.

El puerto natural de Maó

En definitiva, una travesía agradable que otros han hecho con medios menos confortables! Ahora quedan cuatro semanas para volver al Be Water, recorrer otras calas y traerlo de vuelta a Mataró, para iniciar la nueva temporada de regatas, pero eso, será otro post 🙂

Y aquí hay otras fotos de la travesía y de la costa sur de Menorca

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Jul 25 2010

Planeando una Travesía a Menorca

Esta tarde/noche zarpamos de Mataró rumbo Menorca. Ya hemos pertrechado a Be Water, el Sun Fast 36 que estuvimos probando hace dos semanas en la Costa Brava. Es un barco sólido y rápido, con una buena relación lastre/desplazamiento, génova enrrollable y una mayor con dos rizos. Hemos puesto al día todo el material de seguridad aconsejable y necesario para Zona 2 (hasta 60 millas). Llevamos balsa, bengalas, arneses, chalecos y hemos instalado líneas de vida en cubierta. La auxiliar irá deshinchada y estibada en el interior para dejar despejada la cubierta. Esta tarde colgaremos la radiobaliza con zafa hidrostática en el balcón de popa, junto al motor fueraborda de la auxiliar. Llevamos comida, bebida, y hasta una botella de vino para celebrar la llegada.

El plan inicial es tomar un Rv 147º, que nos lleva directos a Ciutadella. Sin embargo la méteo prevista nos obliga a tener un plan B. Olas de 2-3 mts y vientos de NE f6 que pasaran por el N de Menorca nos obligan a ser prudentes. Dado que el viento nos vendrá casi por el través y las olas por la aleta, no es del todo malo, pero las previsiones ya se sabe, lo mismo es un poco menos, como un poco más y hemos de tener en cuenta que el Golfo de León tiene un fetch importante con vientos de componente N, así que mar de fondo asegurada. Observa en los mapas de previsión, como las olas generadas llegan bastante más lejos que el propio viento.

Vientos previstos para las 0200 UTC del 25/7 (eltiempo.es)

Vientos previstos para las 0200 UTC del 25/7 (eltiempo.es)

Altura del oleaje prevista para las 0500 UTC del 25/7 (eltiempo.es)

Altura del oleaje prevista para las 0500 UTC del 25/7 (eltiempo.es)

Esta tarde debatiremos, con la última actualización de las previsiones, si salimos ya o esperamos a la madrugada. Esa segunda opción nos permitirá hacer las primeras millas de noche tranquilos y cuando empiece el oleaje ya estará saliendo el sol, lo que facilita la navegación pues ya ves bien las olas para llevar la caña con más precisión.

El plan B, si a pesar de todo encontramos que el oleaje es demasiado incómodo, sería  virar unos grados a estribor para llegar de arribada a la bahía de Pollensa. Cabo Formentor suele abrigar bien del oleaje de N.

El plan C, si las olas allí aún son muy fuertes, bajar más aún, hasta Sóller

No hay plan D

Este mediodía he estado hablando con Pepe, navegante menorquín que conoce bien su isla y la meteorología de allá y está de acuerdo con estas opciones. También me ha indicado un par de lugares para fondear a la llegada si no encontrásemos sitio en el puerto de Ciutadella. Pepe ha escrito este libro sobre táctica de regatas, que está en mi lista de los deseos desde el mes pasado. Espero hacerme pronto con un ejemplar.


Jul 19 2010

Vela práctica – Hinchado de balsa y chaleco salvavidas

El pasado fin de semana asistí a una formación en seguridad, organizada por ANAVRE, con quienes colaboro desde su fundación, y realizada en las instalaciones de BalsaMar. El tema: hinchado de una balsa salvavidas para 6 personas homologada ISO 9650 (Zona 2) e inflado de un chaleco personal autoinflable (150N).

La demostración fue muy útil pues nos permitió apreciar algunos detalles interesantes. En primer lugar, las válvulas de sobrepresión, que una vez hinchada la balsa dejan escapar el aire sobrante en función de la temperatura ambiente. Una vez estabilizada la presión, podemos cerrar las válvulas y por la noche ajustar la presión manualmente con la bomba de inflar para compensar la reducción de volumen al disminuir la temperatura.

Además aprendimos la diferencia entre una balsa homologada ISO (Zona 2) y una SOLAS (Zona 1). Ésta última tiene un mayor volumen de aire dentro del contenedor, que le permite usar una zafa hidrostática para liberarla automáticamente de su soporte. La balsa de la demostración, ocupa todo el contenedor, así que no tiene flotabilidad hasta que no se dispara el mecanismo de autohinchado tirando de la cinta. No conviene pues instalar mecanismos de zafa hidrostática que probablemente no funcionarán.

El kit interno de una balsa ISO 9650 Zona 2 no incluye comida, agua o útiles de pesca. Es muy recomendable tener una bolsa de «abandono del barco» ubicada a mano en lugar conocido por toda la tripulación, con algunos de esos elementos que nos pueden facilitar las cosas mientras esperamos el rescate. El equipo que incluye la balsa (según la web de BalsaMar) es el siguiente:

Equipo supervivencia «Solas B»
1 Reflector de radar Solas
1 Ancla de capa Solas
1 Botiquín
1 Cuchillo de respeto
1 Linterna con 4 baterías
2 Remos
2 Cohetes paracaídas
3 Bengalas de mano
1 Señal fumígena flotante
1 Achicador
1 Espejo de señales
1 Kit de reparación
1 Fuelle de aire
2 Ayudas térmicas solas
1 Instrucciones
6 Tabletas mareo x persona
1 Tabla de señales
2 Bolsas para el mareo x persona
1 Silbato
2 Esponjas

VÍDEO HINCHADO BALSA

Con los chalecos aprendimos que hay que sujetárselos tirando con firmeza de las cintas para que al hincharse queden bien colocados. También a tener cuidado con el sistema de autodisparo y evitar mojarlo innecesariamente para evitar disparos accidentales. Una vez inflados disponen también de una válvula que permite ajustar manualmente la presión.

VÍDEO INFLADO CHALECO

Para después del verano se quiere organizar otra sesión, pero esta vez en situación real, en el agua y soltando la balsa desde un barco…. allí estaré.


Jul 18 2010

Singladura Costa Dorada

Tres días a bordo del Tuxe, el First 32s5 de Bárbara, un barco increíblemente marinero, que nos ha llevado costa abajo, en busca de viento. Hace ya una semana que la ola de calor nos tiene como aplastados, pero con un poco de bebida fresca lo solucionaremos…. Al llegar a Garraf, sorpresa, la nevera no funciona, parece que ha perdido toda la carga de gas! La comida aún en las bolsas… las cervecitas calientes, gotitas de sudor… frío. No pasa nada, compramos algo de hielo y to padentro. Una vecina de pantalán nos presta una nevera portátil a 12v que probaremos también. Así pues, con el asunto del papeo solucionado, emprendemos nuestra singladura.

Hemos seguido la costa Dorada desde Garraf en dirección SSW. Como salimos por la tarde y además no soplaba casi nada de viento, decidimos hacer noche en Segur de Calefell. Nos levantamos, menos temprano de lo previsto, y tras un buen desayuno partimos al mejor rumbo que nos permite el viento, que es un 190 o algo así. En menos de una hora el viento se queda en nada y decidimos poner motor y arrumbar hacia la costa en Torredembarra. Zona conocida en anteriores navegaciones. Probaremos a fondear cerca de la Punta de la Mora, que es uno de los trocitos de costa que quedan prácticamente intactos y hay que verlo antes de que sea demasiado tarde. Llegando a la zona, el viento arrecia y nos permite navegar a vela otro rato, hasta que localizamos un punto interesante cerca de la playa de Altafulla donde fondear el ancla.
Faro de Altafulla

Maniobra perfecta y a la primera, sobre fondo de arena con 6 metros de sonda y con un margen adecuado a las boyas amarillas por si borneamos. Tras un día de tanto calor el chapuzón es obligado, así que aprovechamos para comprobar el agarre del ancla. Una pareja de delfines saltan por los alrededores, ¡nunca los habíamos visto tan cerca de la costa!

Al caer la tarde cruzamos nuevamente frente al faro de Altafulla y el puerto de Torredembarra y arrumbamos al nuevo Puerto de Roda de Barà, construido a los pies del Roc de Sant Gaietà, a pocas millas de donde estábamos. Entre la información de las cartas y derroteros y el GPS, y que estamos haciendo navegación costera, nos podemos permitir el lujo de elegir dónde queremos cenar 🙂Gps, cartas y derroterosPor aclamación popular se decide que tan duro día de navegación bien merece un premio, así que dejamos al Tuxe bien amarradito al muelle de Port Barà y nos vamos paseando al Roc para elegir la recompensa adecuada.Cenita frente al mar en Roda de Barà

Al día siguiente, en Capitanía, hacemos todo el papeleo y nos despedimos. Nos han tratado muy bien y nos ayudan con las amarras para que podamos cargar combustible. Aunque el sistema es automático un marinero viene expresamente a enseñarnos como funciona. Salimos por la bocana, mayor arriba una brisa de SW nos permite hacer un largo en rumbo directo a Garraf a 5 y 6 kts.

Las olas acompañan, el viento acompaña y tenemos hielo fresco en la nevera que irá enfriando las bebidas. Calafell, Cubelles, Vilanova, Sitges, van desfilando frente a nuestros ojos, en una mañana calurosa y soñolienta. Bajo el tórrido sol, recordamos aquella máxima de un viejo lobo de mar que en sus últimos años decía, si tuviese que darte un sólo consejo,  sería éste: usa protector solar.

¿Qué he aprendido?

  • Ir como patrón, incluso con buen tiempo y en una navegación sencilla como esta, es bastante menos relajado 🙂
    Estás todo el rato pendiente de todo y no te puedes despistar ni un momento. La tendencia natural es a ser más cauto de lo que serías yendo como tripulante.
  • No en todos lo puertos tienen amarras preparadas. En muchos no, hay que llevarlas listas por si acaso. Y yo que creí que eso iba con el amarre.
  • Las cosas practicadas muchas veces como tripulante resultan ya sencillas cuando toca hacerlas. Hay que practicar más y más cosas.
  • Con pocos recursos y sin nevera también se pueden apañar comidas bastante bien.
  • Usa protector solar

Tuxe amarado en Roda de Barà

Han sido tres días, de mar, de buen rollo entre amigos, que nos dejan como imagen al Tuxe, amarrado en Port Barà, aguardando nuestra llegada para llevarnos de nuevo al mar.